Pero gracias a su maldita mediocridad, el entusiasmo se fue perdiendo en sus bolsillos vacíos, que le recordaban que esta era una ciudad infame. Dudó ¿Renunciar?
Pero antes de tomar el ascensor directo a la cesantía y la inopia, volvió sus pesados pasos unos cuantos metros hacia la oficina de su jefe. Lo encontro mirando absorto algo asi como una factura, y le dijo simplemente -todavía estoy esperando el incentivo, conchetumadre.
Una novela para leer en Twitter. Los comentaristas del blog pueden sugerir continuaciones. Cada post tiene un límite de 140 caracteres (el límite de los mensajes en Twitter). Esta novela se actualiza los sábados. A veces los domingos.
6 comentarios:
y marcharse lejos, donde el mundo virtual le llenara de aventuras y placeres mundanos
Al salir del edifico se encontro con un perro abandonado y decido llevarselo a casa.
En la calle, compró un periódico. Había un aviso que decía "se busca gente que haya renunciado a su empleo, recientemente"
Pero gracias a su maldita mediocridad, el entusiasmo se fue perdiendo en sus bolsillos vacíos, que le recordaban que esta era una ciudad infame. Dudó ¿Renunciar?
Pero antes de tomar el ascensor directo a la cesantía y la inopia, volvió sus pesados pasos unos cuantos metros hacia la oficina de su jefe. Lo encontro mirando absorto algo asi como una factura, y le dijo simplemente -todavía estoy esperando el incentivo, conchetumadre.
Caminó con su maleta, miraba a los transeúntes, al cielo gris, encontró un parque para sentarse. Se aflojó la corbata. Quiso empezar algo.
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